Hacia tiempo que no escribía nada, que no dedicaba unas palabras en este espacio dedicado para describir,recordar, porque no, desahogarnos de situaciones y sentimientos que pasamos durante el proceso de adopción.
Tengo pocas novedades que contar, pero tal vez el escribir como nos sentimos en determinados momentos, ayude a llevar un poco mejor la situación actual. Ahora mismo seguimos igual que cuando empezamos la "aventura" de la adopción, la llamo así porque es realmente lo que siento en estos momentos, salvo que no hay "trucos" ni " guías" como las que existen en los videojuegos para ir saltando etapas solucionando problemas.
En estos años de espera, se limitan a decirnos que el proceso se alarga debido a las políticas de los países, que las trabas burocráticas no se solucionan como aquí de fácil, que las distancias no se recorren en horas o minutos, sino en días y meses, en fin que todo son problemas; si a todo esto le unes la falta de información, la ausencia de un listado oficial del país de familias adoptantes y también porque no la dejadez o poco interés que suscitamos en nuestros políticos o dirigentes del país, hace que en determinados momentos te vengas abajo, y pienses que si todo esto algún día tendrá su recompensa o seremos algunos de los que se quedan en el camino.
Ante unos meses un poco movidos, y con subidas y bajadas emocionales, decidimos que lo mejor era plantarnos directamente antes las personas que nos manejan todo el proceso, y que nos explicaran directamente, sin pelos en la lengua, como estaba el proceso. No esperábamos buenas noticias, pero si que no nos mintieran, que no jueguen mas con nuestros sentimientos, también porque no decirlo, con nuestro dinero, y que si el tema estaba jodido no se andarán con rodeo. Así fuimos y así lo entendieron! Salimos de allí sin tener nada claro, puesto que por un lado premiaba el deseo de formar nuestra familia, pero por otro el de no seguir perdiendo el tiempo, en el sentido de que ni ellos mismos saben cuanto más debemos esperar.
Después de hablarlo entre nosotros decidimos seguir, esperar, desesperar y seguir con esta montaña de emociones.
Nadie dijo que esto era fácil.